La administración de quimioinmunoterapia antes de operar un cáncer de pulmón aumenta de una forma significativa la tasa de supervivencia de los pacientes. La revista The Lancet Oncology publicó los resultados del estudio denominado NADIM —“Neoadjuvant chemotherapy and nivolumab in resectable non-small-cell lung cancer (NADIM): an open-label, multicentre, single-arm, phase 2 trial”—, que llevaron a cabo especialistas del Grupo Español de Cáncer de Pulmón (GECP), los cuales abren la puerta a un cambio en el abordaje terapéutico de los tumores. La investigación arrojó resultados en supervivencia que duplican los obtenidos hasta ahora con el tratamiento tradicional (quimioterapia tras la cirugía) y se enfocó en pacientes con cáncer de pulmón en estadios intermedios, aquellos que pueden ser operados pero en los que el tumor ya se ha diseminado a ganglios circundantes. “Estamos hablando de volver curables tumores potencial y mayoritariamente letales», afirmó el doctor Mariano Provencio, presidente del Grupo e investigador principal.
En este tratamiento se combinaron tres ciclos de quimioterapia e inmunoterapia con nivolumab antes de la cirugía y participaron 51 pacientes con cáncer de pulmón localmente avanzado. Los datos son esperanzadores, pues el 89,9% de los 51 pacientes incluidos en el estudio sobrevivió a los dos años y un 77% no tuvo progresión de la enfermedad en este período. Adicionalmente, un 63,4% de los pacientes incluidos tuvo una respuesta patológica completa del tumor cuando se realizó la cirugía (ausencia del tumor). “Es importante porque solo un 30% de los pacientes sobrevivía a los tres años”, agregó. Los investigadores consideran además que esta estrategia proporciona protección al paciente, ya que la presencia de la masa tumoral completa al inicio de la inmunoterapia permite la inducción de una respuesta antitumoral adaptativa más fuerte y el desarrollo temprano de la memoria inmune, que puede proporcionar protección a largo plazo al paciente.
