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Disposición adecuada de residuos de medicamentos, clave en la contención de la resistencia antimicrobiana 

Disposición adecuada de residuos de medicamentos
Es importante no arrojar los sobrantes de medicamentos a las aguas ni a las basuras. Su correcta disposición protege la salud de todos y la del ambiente.

disposición adecuada de residuos de medicamentos

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Disposición adecuada de residuos de medicamentos
Fotos © 2025 - SHUTTERSTOCKPHOTOS
La resistencia a los antimicrobianos —que es la capacidad de microorganismos de sobrevivir a los antibióticos y otros medicamentos —, está estrechamente vinculada con la llamada triple crisis planetaria, causada por el cambio climático, la pérdida de recursos naturales y la contaminación, indica Naciones Unidas. Una problemática que se agrava por las actividades humanas y las modalidades de consumo y producción no sostenibles.
Es tan preocupante el tema que, en 2021, la resistencia antimicrobiana (RAM) fue responsable de 4,71 millones de muertes y, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), podrían ser 10 millones de muertes anuales a 2050. Esta problemática no solo afecta la salud humana, sino también la sanidad animal y el ambiente; poniendo en riesgo el desarrollo sostenible y agravando la pobreza, las inequidades y la inseguridad alimentaria.
Se trata de una amenaza real, que crece a medida que más microorganismos (bacterias, virus, hongos, parásitos) dejan de ser sensibles a los tratamientos (medicamentos antimicrobianos) y, por ende, sobreviven a ellos, lo que hace más difícil tratar las enfermedades infecciosas y facilita su propagación.

Acción conjunta ante la amenaza antimicrobiana

La solución requiere de un trabajo multi e intersectorial entre diferentes sectores involucrados. A nivel global esas acciones son lideradas por la Asociación Cuatripartita, una alianza conformada por la Organización Mundial de la Salud (OMS)/Organización Panamericana de la Salud (OPS), la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), que trabajan bajo el enfoque de ‘Una sola salud’.
Pero, todos somos responsables del problema y de la solución; desde las personas en sus hogares, los trabajadores no solo del sector salud, las empresas, los productores de alimentos, la academia y la industria farmacéutica, entre otros, invitados a hacer un uso responsable de los antimicrobianos, a tener estilos de vida sanos para reducir el riesgo de infecciones y a hacer una correcta disposición de los residuos de medicamentos.
En este último caso, el documento ‘Preparándose para los supermicrobios: fortalecimiento de las medidas ambientales relativas a la respuesta a la resistencia a los antimicrobianos mediante el enfoque ‘Una sola salud’, del PNUMA, resalta la importancia de fortalecer los marcos normativos para incorporar la gestión adecuada de residuos y desechos (con un enfoque en todo el ciclo de vida) en los procedimientos operativos estándar (POE) utilizados en la producción de antimicrobianos, así como apoyar más iniciativas voluntarias de la industria farmacéutica para gestionar y reducir al mínimo la descarga de compuestos antimicrobianos y aplicarlo en las cadenas de fabricación y suministro.

Política ambiental

La industria farmacéutica ha ratificado su compromiso de garantizar la correcta gestión medioambiental de residuos de medicamentos, para evitar que terminen contaminando ríos y suelos, desde la Asociación de Laboratorios Farmacéuticos de Investigación (Afidro), la Federación Centroamericana y del Caribe de Laboratorios Farmacéuticos (Fedefarma) y la Federación Latinoamericana de la Industria Farmacéutica (Fifarma), entre otros.
En Colombia, la política ambiental para la gestión integral de residuos peligrosos y su plan de acción 2022-2030, incluye la gestión de desechos de medicamentos, con dos enfoques regulatorios. Uno desde la perspectiva del generador, responsable de la gestión de residuos nocivos desde su generación hasta su disposición final; el segundo, del fabricante e importador, a través de la implementación del principio de Responsabilidad Extendida que, en articulación con otros actores, debe encargarse de los restos que se generan una vez el producto puesto en el mercado ha finalizado su vida útil y es descartado por el usuario.
“Ambas estrategias son complementarias, se trabajan articuladamente y, por supuesto, obedecen a un marco regulatorio general; en particular, en el caso colombiano, la Ley 1252 y el Decreto 4741 de 2005, compilado en el Título VI del Decreto 1076 de 2015 o Decreto Único Reglamentario del Sector Ambiente y Desarrollo Sostenible, relacionado con la gestión de residuos peligrosos en el país”, explica el ingeniero Diego Escobar Ocampo, coordinador del grupo de sustancias químicas y residuos dañinos del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia.

Responsabilidad en residuos posconsumo

Como la mayor generación de estos residuos está ligada a actividades relacionadas con el sector salud, el Decreto 351 de febrero de 2014, compilado en el Decreto 780 de 2016 o Decreto Único Reglamentario del Sector Salud y Protección Social ‘reglamenta la gestión integral de los residuos generados en la atención en salud y otras actividades’, a partir de principios de bioseguridad, gestión integral, precaución, prevención y comunicación del riesgo.
Allí, dentro de su ámbito de aplicación, están las Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS), las farmacias y droguerías, los laboratorios de biotecnología, los consultorios y clínicas veterinarias, las droguerías veterinarias, los servicios de estética y cosmetología, incluidas barberías y peluquerías, entre otros, que representan el 54,6 % de establecimientos generadores de residuos peligrosos que reportan a la corriente Y3 en el país (código para los residuos de medicamentos de acuerdo con la regulación nacional y que se encuentra articulado con los listados de residuos perjudiciales del Convenio de Basilea).
Fotos © 2025 - SHUTTERSTOCKPHOTOS

Estos generadores tienen obligaciones como entregar los residuos a transportadores que cumplan con las condiciones para llevar mercancías peligrosas (Decreto 1079 de 2015 o Decreto Único Reglamentario del Sector Transporte), y a un gestor autorizado (con licencia ambiental aprobada por autoridad ambiental) que garantice su manejo adecuado.

En cuanto al Principio de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) para la gestión de los residuos posconsumo, se señala que: “Por los impactos ambientales de sus productos a lo largo de su ciclo de vida, desde su diseño, extracción de materias primas, fabricación y comercialización, hasta la etapa final del producto como residuo en la fase posconsumo; en la aplicación de este principio, deben organizar y financiar la gestión de los productos que ponen en el mercado al final de su vida útil cuando se convierten en residuos”.

Al punto azul

Una de las estrategias exitosas en Colombia para la gestión de residuos de medicamentos es el Punto Azul. Cuenta con 2.314 contenedores (para medicamentos vencidos, deteriorados o parcialmente consumidos) ubicados en grandes superficies, centros comerciales, droguerías y farmacias, y universidades, facilitando su disposición final adecuada.
Nació en 2010 como programa posconsumo de medicamentos y en 2013 se convirtió en la Corporación Punto Azul, que representa a la industria farmacéutica del país y ha recolectado más de 4.090 toneladas de residuos de medicamentos entre 2010 y 2024.
Por otro lado, tienen un plan de gestión de residuos de envases y empaques, para evitar que sean utilizados en falsificación, invitando a que estos sean arrugados, rotos o se les quite su etiqueta, antes de depositarlos en los contenedores.

Un liderazgo que suma al planeta

Con su lema ‘15 años haciendo feliz al planeta’, Punto Azul preside en la actualidad la Red Iberoamericana de Programas Posconsumo de Medicamentos, creada para facilitar un intercambio de experiencias de las mejores prácticas para el diseño, la organización, estructuración, ejecución y puesta en marcha de programas posconsumo de medicamentos en la región.
“Lo que hacemos, teniendo en cuenta el tipo de desechos que produce la industria, tiene un impacto muy importante, porque beneficia la salud pública de la gente, previene la falsificación y contribuye enormemente al medio ambiente”, explica Jorge Trujillo, director de la Corporación.
Uno de los retos hoy en día desde la industria farmacéutica y, en general, de las autoridades ambientales, es ampliar la ubicación de puntos de recolección, ya que un 67 % están ubicados en Antioquia, Bogotá, Cundinamarca y Valle del Cauca, y falta llegar a zonas más apartadas y menos desarrolladas, que también producen residuos de medicamentos.

A contener la resistencia

Colombia adelanta diversas estrategias para contener la RAM, a partir de proyectos como ‘Trabajando juntos para combatir la resistencia a los antimicrobianos’, bajo el enfoque de ‘Una salud’, financiado por la Unión Europea (UE), con la asesoría técnica de la OMS/OPS, la OMSA, la FAO y, hace poco, la vinculación del PNUMA, y del que además hacen parte Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay.
Así mismo, se adelanta un trabajo multi e intersectorial que lidera el Ministerio de Salud y Protección Social con sus entidades adscritas (Instituto Nacional de Salud -INS- y el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos -INVIMA), el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR), con el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (AGROSAVIA), y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS).
Para este 2025, el país tiene dentro de sus retos acercar más el tema de la resistencia antimicrobiana a las comunidades, con el propósito que entiendan la importancia de hacer un uso prudente de los medicamentos y su correcta disposición de residuos, entre otros temas, evitando, por ejemplo, que altas concentraciones de desechos y contaminantes, entre ellos los antimicrobianos, lleguen a las aguas y pongan en riesgo a algunas especies.

También te puede interesar: Información para la compra de medicamentos

Bibliografía

Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS). Política ambiental para la gestión de residuos peligrosos y Plan de Acción 2022-2030. Consultado en:
https://www.minambiente.gov.co/wp-content/uploads/2022/05/Actualizacion-Politica_Ambiental_RESPEL-2022-2030.pdf
Ministerio de Salud y Protección Social (MSPS). Decreto 780 o Decreto único reglamentario del sector salud y protección social.
Consultado en:

https://www.minsalud.gov.co/Normatividad_Nuevo/Decreto%200780%20de%202016.pdf  
Naciones Unidas. (2023). ‘I Informe bienal cuatripartito ‘Implementación del plan de acción mundial sobre la resistencia a los antimicrobianos’ (OMS, FAO, OMSA).
Consultado en:
 
https://iris.who.int/bitstream/handle/10665/375008/9789240074668-eng.pdf 
Naciones Unidas. (Noviembre 2024). ‘Declaración política de la reunión de alto nivel sobre la resistencia a los antimicrobianos’.
Consultado en:
https://documents.un.org/doc/undoc/gen/n24/292/77/pdf/n2429277.pdf 
OPS Colombia. ‘Colombia trabaja unida para combatir la resistencia a los antimicrobianos’.
Consultado en:

https://www.paho.org/es/colombia-trabaja-unida-para-combatir-resistencia-antimicrobianos 
OPS Colombia. (2021). ‘El medio ambiente, arma y escudo de bacterias multirresistentes’.
Consultado en:

https://www.paho.org/es/noticias/4-3-2021-medio-ambiente-arma-escudo-bacterias-multirresistentes 
Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). (2023). ‘Preparándose para los supermicrobios: fortalecimiento de las medidas ambientales relativas a la respuesta a la resistencia a los antimicrobianos mediante el enfoque de Una sola salud’.
Consultado en:

https://www.unep.org/es/resources/superbugs/environmental-action 

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