Poner un punto final y terminar capítulos en la vida, no siempre es una decisión fácil y lograrlo requiere de tiempo. Seguir adelante es una decisión personal que ayuda a liberar cargas emocionales y a prepararse para enfrentar nuevos retos y situaciones.
Como si se tratara de un libro, en la vida cotidiana son muchas las situaciones que nos hacen plantearnos la posibilidad de pasar la página en algún momento. Una ruptura amorosa, un cambio laboral o un duelo pueden empujar a una persona a decidir cerrar el ciclo y continuar adelante, y aunque esta es una manera de enfrentarse a la realidad, casi nunca es sencillo, pues implica desapegarse, despedirse y, en algunos casos, perder.
Y aunque desde el exterior muchas personas crean que lo mejor es darle la vuelta a esa página en una determinada situación, para quien debe hacerlo, la incertidumbre es la emoción que más acompaña este camino.
“Todos hablamos sin inconveniente de la necesidad de cerrar ciclos hasta que nos enfrentamos a un momento de estos en el que somos nosotros mismos los que debemos pasar la página. Es allí cuando el temor y la ansiedad aparecen, pues no sabemos qué va a pasar después. Nos aterra la soledad, la tristeza y lo nuevo que pueda llegar”, destaca Ana María Duarte, psicóloga clínica y especialista en Programación Neurolingüística.
Un pequeño empujón
Dar el paso de ponerle punto final a una situación o vivencia en particular, generalmente, no ocurre de la noche a la mañana. La persona que tiene el dilema de pasar la página o no, se enfrenta a un tiempo en el que no sabe muy bien qué hacer, no entiende si es lo correcto y se pregunta si se arrepentirá.
Pero suele ocurrir que hay un detonante que impulsa a la persona a dar el paso. Ya sea que alguien la alentó, una situación puntual que se presentó ‒o el sentimiento de aburrimiento de seguir en lo mismo‒ pueden hacer a que se decidaa empezar un nuevo camino. “Siempre hay algo que nos empuja a tomar la decisión y ya sea el cansancio, la monotonía o el agotamiento que produce esa situación. Es ahí cuando nos armamos de valor y pasamos la página”, comentaAna Lucía Torres, psicóloga y coach de vida.
Lo cierto es que este se convierte en un proceso complejo, que normalmente vaacompañado de emociones en contravía que pueden desacelerar el camino y, por lo tanto, hacer que se reconsideren algunas cosas que se están dejando atrás. Por ello, las expertas consultadas recomiendan estos pasos cuando se quiere dejar atrás un asunto determinado:
Y, ¿cuándo es el momento indicado?
Poder dar comienzo a un nuevo ciclo y tener otras oportunidades sucede cuando se es consciente de que hay una desconexión con las emociones negativas que se producen ante una situación determinada. “Pasar la página significa cerrar ciclos o concluir una etapa, y esto implica obligatoriamente la necesidad de soltar. Y ya se trate de personas, posesiones o sentimientos, el desapego en general es difícil, pues nos cuesta dejar ir sin tener algo que funcione como suplente de eso que estamos soltando”, resalta Duarte.
No obstante, el momento preciso es cuando se está listo para afrontar el reto de dejar ir y darle la bienvenida a un nuevo panorama, haciendo conciencia de la importancia de este proceso, liberando todas las emociones y, sobre todo,entendiendo que detrás de esto hay un aprendizaje.
Así mismo, es fundamental entender que pasar la página no siempre tiene que ver con dar por terminado una fase, situación o relación. De hecho, puede ser un nuevo comienzo dentro de esa misma etapa que se está viviendo. Por ejemplo, en una relación de pareja, se puede pasar la página para dejar atrás dificultades, malos entendidos o problemas, y así encontrar la mejor manera de superarlos para seguir adelante.
¿Cómo saber si quedó todo atrás?
En ocasiones creemos y nos queremos convencer de que aquella situación que nos genera conflicto ya quedó atrás y que ya mismo es posible seguir adelante como si nada; sin embargo, no siempre es así.
“Tratar de pasar la página puede llevar muchos intentos y esto hace parte del proceso de cada persona. Lo importante en cada caso es que sepa reconocer su esfuerzo personal por dejar atrás eso que ya no lo hace sentir pleno y las herramientas que está usando en ese camino. Acá el autosabotaje puede aparecer y hacernos repetir conductas que creímos dejar en el olvido como, por ejemplo, buscar a una expareja con la que habíamos decidido cortar relación”, puntualiza Ana Lucía Torres.
Por eso, para descubrir si la página ya se ha pasado y se está listo para dar inicio a un nuevo camino, hay algunos indicadores que le pueden decir si ese momento ya llegó. De acuerdo con la psicóloga española Ana Hidalgo en su página web, existen tres claves que permiten revisar este tema. Si alguna de ellas se cumple,es probable que el ciclo no esté del todo concluido:
Esto es, cuando se vive una mala experiencia o hay dolor de por medio, no es suficiente con olvidarlo, sino que hay que perdonar a la fuente de ese dolor para poder continuar y también a sí mismo por cosas como las decisiones tomadas o las acciones realizadas que, por lo general, causan sentimientos de arrepentimiento y dolor.
