La terapia recibió la autorización de uso de emergencia en Estados Unidos en noviembre del año pasado, después de que se utilizara para tratar al expresidente Donald Trump.
La Organización Mundial de la Salud ha recomendado el uso combinado de los fármacos casirivimab e imdevimab, un conjunto de medicamentos que usan anticuerpos monoclonales, para el trato de dos grupos determinados de pacientes con coronavirus: los pacientes con síntomas leves o moderados, pero con un alto riesgo de acabar hospitalizados por presentar alguna comorbilidad, o para aquellos pacientes graves cuyo sistema inmunológico no produce anticuerpos.
De acuerdo con la Guía de recomendaciones terapéuticas de la OMS: “Aunque el casirivimab y el imdevimab consiguen una reducción sustancial del riesgo relativo de hospitalización, el beneficio será trivial o carecerá de importancia en términos absolutos para todos los casos, excepto los de mayor riesgo, para los que debería reservarse la intervención”.
El medicamento denominado REGEN-COV, que es la combinación de los fármacos casirivimab y el imdevimab, es desarrollado por la empresa Regeneron (Estados Unidos) y la multinacional Roche (Suiza). Dicho tratamiento neutraliza la capacidad del virus para infectar a las células e imita los anticuerpos naturales producidos por el cuerpo humano para combatir las infecciones, el fármaco se administra vía intravenosa en una sola dosis.
Países como Reino Unido, Japón, India y ahora Estados Unidos cuentan con el aval para la intervención con este tratamiento en casos de emergencia.
Precio y asequibilidad
Por ahora el precio de este tratamiento es tan elevado que probablemente no esté al alcance de toda población, por lo que la farmacéutica suiza Roche ha estado trabajando en asociación con Regeneron, que tiene la patente, para producir el tratamiento. Por su parte, UNITAID, un organismo sanitario de la ONU, está negociando directamente con Roche para conseguir precios más bajos y una distribución equitativa en todo el mundo. Así mismo, la OMS también ha mantenido conversaciones con la empresa para la donación y distribución del medicamento a través de UNICEF.
